En la noche del 18 de agosto, Schäffer fue trasladado junto a toda la tripulación del U-977 a la isla Martín García.
En el Boletín Oficial del martes 28 de agosto de 1945 se puede leer el decreto por el cual se pone a disposición de los gobiernos de Estados Unidos y Gran Bretaña al submarino U-977 y a su tripulación.
Finalmente, el U-977 fue torpedeado durante una práctica por el submarino USS Atule en noviembre de 1946.
Con el submarino se fue pique gran parte de los secretos que aún hoy siguen alimentando la leyenda del U-977. Hay quienes creen que el U-977 trajo a Hitler a la Argentina, otros dicen que este submarino y el U-530 en realidad trasladaron a jerarcas nazis a una base alemana secreta en la Antártida.
Meses antes del arribo del U-977 y aún del U-530, en nuestro país se esperaba la llegada de submarinos alemanes. Una carta del Ministerio de Marina fechada el 17 de mayo de 1945 y a la que sólo tenía acceso personal de alto rango, revela que se esperaba la llegada de esas naves y que se había ordenado extremar la vigilancia a la Prefectura ante la posibilidad de que los tripulantes de los submarinos decidieran entregarse o hundir los U-Boot y luego desembarcar en la costa.
Un documento del FBI del 14 de julio de 1945 habla de avistamientos de submarinos en la Provincia de Santa Cruz y de la sospecha de que Hitler haya llegado a la Argentina en uno de esos submarinos y de los rumores de que el Führer fue trasladado a la provincia de Chaco.
A pesar de las sospechas que despiertan estos documentos reservados, no existen siquiera precisiones para conocer cuál fue el verdadero derrotero del U-977 desde que partió del puerto de Kiel, el 13 de abril de 1945.
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