Un posteo de @cristinam_escritora en Threads, en el que reflexionaba sobre la frustración que provoca intentar escribir ficción con inteligencia artificial, me llevó a compartir mi propia experiencia en un extenso hilo.
Escribir con IA no es tan simple como muchos creen. Requiere tiempo, esfuerzo y una comprensión profunda de su funcionamiento. Solo resulta útil cuando permite aumentar la productividad, especialmente en entornos donde es necesario producir mucho contenido en plazos breves.
Después de más de un año utilizando IA como periodista, aprendí que esta tecnología solo sirve para generar borradores.
Recién cuando la herramienta ha aprendido tu tono y estilo, el resultado empieza a sonar natural.
Escribir ficción con IA, en cambio, es adentrarse en un laberinto. He pasado horas conversando con distintos modelos para diseñar un procedimiento que acelere la producción de un libro, y la respuesta siempre es la misma: la IA solo puede ofrecer un primer borrador que deberás revisar y adaptar a tu voz.
El proceso, en líneas generales, debería seguir estos pasos:
1. Escribir un guion detallado de cada capítulo.
2. Crear una guía de personajes con sus características y motivaciones.
3. Aportar un texto propio que refleje tu estilo, para que la IA lo tome como referencia.
Una vez que adjuntás el guion, la guía de personajes y el texto de estilo, recién podés pedirle que escriba el primer capítulo.
Cuando lo tengas, deberás corregirlo y, para continuar con el siguiente, volver a cargar los tres documentos anteriores más el capítulo ya escrito, de modo que se mantenga la continuidad narrativa.
Este procedimiento debe repetirse cada vez que avances, e incluso conviene sumar un resumen de lo ya escrito, porque la IA tiende a “olvidar” detalles o desviarse del hilo.
En definitiva, escribir una novela con inteligencia artificial —a pesar de lo que prometen algunos influencers en YouTube o redes sociales— puede demandar al menos un mes y medio de trabajo, con muchas horas de edición, corrección y control de coherencia.
Cuando el primer borrador esté completo, todavía será necesario usar otra IA para verificar la consistencia del texto: que los personajes mantengan el mismo color de ojos, la misma edad o los mismos rasgos de capítulo en capítulo.
Por eso, escribir con IA y lograr un texto a la altura de tus estándares es tan o más difícil que hacerlo sin ella.
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