Con la presencia de 300 delegados de 18 provincias, comenzó a sesionar en Buenos Aires el XVIIº Congreso del Partido de los Trabajadores Socialistas en el Frente de Izquierda. Luego de un extenso debate sobre la crítica situación nacional, el congreso resolvió por unanimidad proponer al FIT la candidatura presidencial de Nicolás del Caño y lanzar una intensa campaña de agitación con el siguiente planteo: "Derrotemos al FMI, Macri y los gobernadores. El kirchnerismo, aliado de la burocracia sindical, la Iglesia y los gobernadores del PJ, no puede ser alternativa. Que la crisis la paguen los grandes empresarios, banqueros y terratenientes. Construyamos una gran fuerza política que impulse la movilización independiente de los trabajadores, las mujeres y la juventud. Por un gobierno de trabajadores".
La diputada Myriam Bregman señaló que "en la Argentina el verdadero poder lo tiene el FMI, y bajo su mandato inevitablemente se profundizarán la miseria de millones, los despidos, el atraso y la dependencia del país. El FMI, como representante del capital imperialista, reclama para el próximo Gobierno una mayor flexibilización laboral, elevar la edad de los jubilados y aumentar el IVA a los productos de primera necesidad".
Por su parte, el dirigente Christian Castillo agregó que "de la mano del FMI, el Gobierno de Macri está llevando a la Argentina al desastre con la complicidad de los gobernadores y senadores peronistas. El kirchnerismo se presenta como una alternativa, pero en las provincias pacta con los gobernadores del ajuste, como Schiaretti, Bordet, Bertone o Manzur, y no se propone romper con el FMI, una medida elemental de soberanía nacional. Junto con Lavagna y Massa, los voceros de Cristina proponen renegociar con el FMI. Cualquier renegociación significará más años de ajuste contra el pueblo. No hay medias tintas: o se rompe con el FMI o se profundizará el ajuste contra las mayorías populares".
Asimismo, el congreso del PTS/FIT proclamó hoy a Nicolás del Caño como precandidato presidencial del Frente de Izquierda, para integrar una fórmula con Romina del Pla del Partido Obrero, y se resolvió participar de un acto obrero e internacionalista el 30 de abril en las vísperas del Día Internacional de los Trabajadores, como parte de una exigencia de un paro de 36 horas, para preparar la huelga general hasta derrotar al Gobierno del FMI.
Al comenzar el congreso los delegados definieron por aclamación la presidencia honoraria de los "chalecos amarillos" de Francia y la de los pueblos de Argelia y Sudán, que están protagonizando rebeliones contra sus Gobiernos proimperialistas y en la presidencia efectiva a compañeras y compañeros de Zanon y la ex-Donnelley bajo gestión obrera, dirigentes de la agrupación de mujeres Pan y Rosas, referentes del movimiento estudiantil secundario y universitario y de la intelectualidad marxista.
En el congreso participan delegaciones de trabajadores que están protagonizando luchas contra los despidos en las empresas FEMSA/Coca Cola, Siam, Mondelez, así como docentes, trabajadores de las principales empresas industriales y de servicios del país.




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