Mario Carrozzi es conocido en nuestra ciudad por sus conocimientos sobre la Segunda Guerra Mundial y por haber escrito un libro sobre el tema. Sin embargo, otras aficiones de Mario son la numismática y la medallística.
Hace tres décadas se interesó por las medallas acuñadas en nuestra ciudad y comenzó a coleccionarlas. Del producto de esa colección y de la investigación y el seguimiento de las piezas, surgió “Necochea en la medalla”, el primer libro sobre la medallística local.
Este libro es un profuso catálogo sobre gran cantidad de medallas acuñadas en Necochea y también en localidades que pertenecieron o pertenecen al distrito como Quequén y San Cayetano.
Carrozzi se propone reconstruir la historia local a través de esas medallas, la mayoría de ellas acuñadas con motivo de hechos históricos de gran trascendencia para la localidad. Además de las fichas de cada una de las medallas catalogadas, se publican fotos de anverso y reverso de las mismas.
Por este motivo, esta publicación se convierte en fundamental para la medallística local y permite a nuestra ciudad ingresar entre el selecto grupo de las pocas localidades de nuestro país que cuentan con un catálogo de esta naturaleza.
Debido a ello y a lo específico de su contenido, el libro de Carrozzi ha generado un gran interés en el mundo de la numismática y la medallística de todo el país.

Por la historia
El necochense Mario Carrozzi se hizo conocido a mediados de los 70, cuando siendo un adolescente, participó del programa de televisión “Odol Pregunta” y durante cinco semanas respondió sobre la Segunda Guerra Mundial.
Sus conocimientos sobre el conflicto bélico lo llegaron a comenzar a escribir un libro en 1983. En un principio iba a titularlo “Los nazis en la Argentina”, pero finalmente se llamó “Del Tercer Reich a la Argentina” y fue publicado en 2011.
Además de la Segunda Guerra Mundial, a Carrozzi siempre le atrajo la numismática. Fue precisamente a partir de un encuentro por el Día de la Numismática realizado en 1985 en nuestra ciudad, que Carrozzi comenzó a realizar un fichaje de todas las medallas acuñadas en nuestra ciudad que se encontraban en el Museo Histórico Regional.
Carrozzi comenzó a coleccionar medallas locales y continuó con la investigación durante todos estos años.
Fue así que el año pasado, decidió convertir todo ese material en un libro que decidió publicar por cuenta propia.

Valor histórico
En el libro se pueden observar algunas medallas conocidas por los necochenses, como la del Centenario de Necochea, acuñada en 1981, o la del 75 aniversario del Puente Colgante.
Pero también otras sólo conocidas por determinados grupos de la sociedad, como las acuñadas por las logias masónicas locales.
Entre estas últimas se encuentra una muy particular y que Carrozzi consiguió tras una ardua pesquisa: una entregada por la Logia Masónica Sol Argentino 160 al fundador de la ciudad, Angel I. Murga.
“Se trata de una medalla personal acuñada en 1900 que yo había visto en un comercio de antigüedades pero que no pude adquirir sino después de varios años debido al alto costo que tenía”, explicó Carrozzi.
En las fotografías se pueden ver medallas de la Parroquia Santa María del Carmen, de las romerías populares de Ramón Santamarina, de la Inauguración de una sala del Hospital Díaz Vélez, de la inauguración de la Iglesia de Claraz o del edificio de la Unión Vecinal de Fomento de Quequén.
Pero además, Carrozzi fichó medallas sobre la ciudad, conmemorativas, credenciales y personales, otras entregadas como premio e incluso pruebas de cuño.
“Necochea posee una importante cantidad de medallas, pero la gran dispersión de este tipo de material, la falta de registros de las mismas, la inexistencia de un registro medallístico creado en los albores de la ciudad, a partir de la fundación y la destrucción de algunos archivos documentales (…) hacen que esta tarea sea compleja”, explica Carrozzi en el libro.
Señala como especialmente perjudicial para esta tarea la destrucción de los archivos de la “antigua Logia Masónica Nº 160 El Sol Argentino, creada en el año 1904 y la Logia Masónica General Mariano Necochea, que levantó columnas del templo en el año 1904, cuyos miembros habían tenido una importantísima influencia en la fundación y en los primeros gobiernos de la localidad”.
Explica que su libro “de ninguna manera pretende ser un trabajo completo ni definitivo sobre el tema, sino que tal vez sirva para que persona que posean otras medallas que no figuran en este catálogo, permitan que los estudiosos puedan examinarlas detenidamente y tomen debida nota de esta información con el fin de incrementar el conocimiento sobre la historia de la ciudad, a través de estas piezas”.

Artículo publicado en Ecos Diarios de Necochea

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